Por fin orgulloso del Atletico de Madrid

La noche del 27 de agosto de 2008 dificilmente será olvidada por los sesenta mil aficionados rojiblancos que llevaban más de una decada sin recibir nada a cambio de todo el apoyo y lealtad que han ofrecido sin condiciones durante este largo periodo. Pocos son los que perdían la ilusión verano a verano y fracaso tras fracaso; esas decenas de miles de aficionados jamás han perdido la fe y la esperanza de volver a ver a su equipo en lo más alto. Pero tras una nefasta pretemporada llena de altas y bajas y de muchos despropósitos uno perdió la ilusión. El que escribe estas lineas se hartó de su Atleti de toda la vida, quiso dejarlo, renovó el abono a regañadientes, con mala cara; no sentía cosquilleo ninguno los días previos y fue el campo triste y sin ganas.
Era la hora de que la ilusión se recobre merced a un gran encuentro de fútbol y no por culpa de una buena campaña publicitaria o varios fichajes.

El estadio vestía sus mejores galas, la camiseta rojiblanca era casi obligatoria en esta tarde noche de verano y el colorido y el ambiente era espectacular. Qué el estadio se llene y la gente ilusionada se vuelque con el equipo no es novedad. Pero que el equipo salga a por todas y se deje la piel en el campo sí.

Salió el Atlético muy enchufado liderado con un genial Maniche y pese a no confirmar su superioridad en los minutos iniciales tan sólo bastaron unos cuantos balones a Sergio Agüero para que el balón se fuese masticando hasta que tras un centro de Perea desde la banda el Kun marcase su enésimo gol con el Atlético de Madrid. Una vez más apareció Agüero, una vez más marcó el de siempre y la grada rugía como nunca gracias al cabezazo preciso del mejor jugador rojiblanco.
Tras el primer gol gracias a un gran Ujfalusi y al trabajo de todo el equipo se mantenían las lineas y la defensa aunque con algún susto se mantuvo la portería a cero. Maxi estuvo a punto de marcar el segundo pero lo evitó el poste. Pero el que no falló cara a gol fue un triste Forlán, apagado en la primera parte pero determinante en los momentos clave. Tras el gol de Forlán el festival ofensivo no cesaba y kun Agüero no demostraba piedad ninguna sobre los rivales. Tras una gran jugada del argentino Luis García que había entrado por el uruguayo marcó el tercero de la tranquilidad.
El asedio no cesó y la última jugada de Agüero en el campo fue un preciso pase entre lineas al portugués Simao que remató Maxi transformando el claro penal cometido sobre el luso.

La afición disfruto de lo lindo y por fin tiene algo que celebrar. Ya se acabaron las menudeces y por fin sonará el himno de la Champions en el Vicente Calderón.

Leo Franco 2 Al final solventó sin problemas los problemas que acarrearon los balones aéreos.
Perea 2 Dio un gran susto, un pase de gol y mucha seguridad en defensa.
Ujfalusi 3 Sensacional el nuevo jefe de la zaga. Muy bueno en el juego aéreo.
Heitinga 2 Tapó muy bien y se afianza poco a poco como buen central que es.
Pernía 1 El más inseguro de la defensa, volvió a acabar con tarjeta.
Raúl García 2 El pivote que necesita el equipo para bascular y ordenar al equipo pero con poca presencia ofensiva.
Maniche 3 Muy presente y activo todo el encuentro, robó, asistió y se incorporó al ataque.
Maxi Rodríguez 2 Sacó la garra y lucha, estuvo incisivo y muy trabajador.
Simao 2 No fue su partido más brillante pero siempre estuvo vertical y peligroso.
Forlán 2 Muy fallón en la primera parte apareció cuando más se le necesitaba.
Kun Agüero 4 El líder, el genio, el que tira del carro, el que nunca falla. La Champions es obra suya.
Luis García 2 Salió a mantener la pelota y darle velocidad y juego al ataque y marcó un gol y estuvo participativo.
Assunçao 2 Lucho y fue la roca que presumía en los pocos minutos que dispuso.
Sinama s/c